Muchos jardineros consideran que el estiércol de pollo es un fertilizante respetuoso con el medio ambiente, pero hay una serie de situaciones en las que se debe abandonar dicha alimentación.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea Belnovosti, agrónoma y paisajista, enumeró las desventajas de los excrementos de aves.
Por lo tanto, no se debe utilizar estiércol de pollo para lechuga, eneldo, perejil y cebolla. Los cultivos verdes tienen la capacidad de acumular fertilizantes en la parte aérea, la parte que se destina a los alimentos.
Por lo tanto, los agricultores experimentados están seguros de que, gracias a la aplicación de dicho fertilizante, las verduras tendrán un sabor y un olor específicos.
Por la misma razón, conviene dejar de consumir heces justo antes de la cosecha.
¿Sabías que el arsénico se encuentra en pequeñas concentraciones en los excrementos de pollo?
Pequeñas dosis de este fertilizante son inofensivas para el cuerpo humano, pero si se usa con regularidad, existe la posibilidad de que el veneno se acumule y las dosis ya no sean seguras.
Además, no conviene utilizar estiércol de pollo para aplicar fertilizante a las hojas. Debido al alto contenido de urea y cal, se producirán quemaduras en las plantas, que pueden ser fatales.