Un día, los jardineros se enfrentan al hecho de que un manzano sin pretensiones de repente comienza a secarse. Podría ser la copa del árbol o una de las ramas.
Intentemos averiguar cuál es el motivo y si es posible detener el proceso. A veces la respuesta se encuentra literalmente en la superficie.
Es necesario prestar atención a la composición del suelo, el clima y recordar la última vez que realizó un tratamiento contra plagas y enfermedades.
Esto podría ser un calor extremo en verano, un invierno helado con poca nieve, por lo que la rama se congeló, fuertes lluvias, etc. Los problemas solo se pueden evitar si se planta una variedad adaptada a las condiciones climáticas específicas.
Surgen problemas si el árbol crece en areniscas o en suelos arcillosos pesados. Las aguas subterráneas muy ubicadas y los suelos pobres afectan negativamente el desarrollo.
Todo esto se puede evitar si cuida adecuadamente su manzano y elige sabiamente las plántulas. Las raíces deben ser 2 veces más grandes que la corona y la profundidad del agujero debe ser de al menos 70 cm. Las plantaciones más cercanas no deben ubicarse a menos de 2 metros del lugar donde se planta el manzano. También es importante abordar la poda de árboles con prudencia.
Además de las orugas y los escarabajos, los ácaros, los ácaros rojos, los pulgones, los psílidos y los escarabajos de cristal pueden causar daños importantes a los manzanos. Los pesticidas se aplican antes de que comience la floración.
Entre las enfermedades, el árbol puede verse afectado por sarna o mildiú polvoriento. Ayuda podar y eliminar los brotes dañados, así como el procesamiento oportuno.
No se debe esperar que si el árbol está sano externamente, la cosecha no esté en peligro. Por el momento, muchas enfermedades no se manifiestan. Por eso, es tan importante llevar a cabo la prevención y seguir los consejos para el cuidado de un manzano en primavera y otoño.