Los jardineros se enfrentan al problema cuando el suelo del jardín no es apto para plantar.
Es imposible clavar una pala en ese suelo y la cosecha es escasa y sin sabor.
Hay varias formas de mejorar el suelo para que quede suelto y suave.
Si su cabaña de verano tiene arcilla sólida o marga, la mejor solución es lijar. Al agregar arena para excavar, se utiliza arena de río de grano grueso. Su cantidad variará dependiendo de la densidad del suelo del sitio. Entonces, sobre marga, agregue hasta 25 kg de arena por metro cuadrado.
Aditivos como perlita, vermiculita y harina de dolomita aflojan bien la tierra.
Los aditivos orgánicos, cuando se aplican, saturarán el suelo con humedad, mejorarán la composición y nutrirán las plantas con sustancias útiles.
Como fertilizantes se utilizan compost, aserrín fermentado, turba y estiércol.
Ayudará a retener la humedad en el suelo, mejorar la estructura y reducir la cantidad de malezas. La capa protectora en el jardín se crea a partir de diferentes materiales. Los más populares son la hierba, la paja, las virutas o la corteza.