Al comienzo de la nueva temporada, es necesario tener a mano semillas y tierra de alta calidad.
La cosecha futura depende en gran medida de la calidad del terreno para las plántulas. El suelo debe ser nutritivo y suelto, libre de hongos y larvas de plagas.
Antes de comenzar a usar tierra para las plántulas, es necesario desinfectarla: cocer al vapor, calcinar, encurtir.
El suelo de alta calidad para plántulas incluye los componentes necesarios para aumentar el valor nutricional y mejorar su estructura.
Para preparar el suelo para las plántulas, puede utilizar tierra de césped, humus de hojas, turba baja, arena de río, abono, musgo sphagnum, tierra de parterres y ceniza de madera.
Se agregan fertilizantes minerales y orgánicos a la mezcla del suelo, lo que aumentará la fertilidad del suelo y mejorará su estructura.
Algunos jardineros creen que las hojas de té, el aserrín fresco, el estiércol o la arcilla pueden mejorar la calidad del suelo. Sin embargo, esto no es cierto. Los componentes en descomposición pueden atraer plagas del suelo y proporcionar alimento a los hongos.
La mezcla de tierra universal debe contener: 1 parte de humus, turba, arena de río y 2 partes de tierra de jardín.