Los jardineros dicen que el cuidado de las frambuesas remontantes se diferencia de las habituales no solo en la poda, sino también en la aplicación de fertilizantes.
Esto se debe a las características de fructificación, que difieren significativamente de las frambuesas comunes. La planta remontante necesita una nutrición intensiva durante toda la temporada de crecimiento.
Te contamos cómo alimentar este cultivo en primavera, utilizando fertilizantes minerales y orgánicos.
Los aditivos se aplican después de que la nieve se derrita. Cuando se establece una temperatura positiva, es necesario comenzar con las medidas básicas para el cuidado de las frambuesas:
Antes de que el suelo se descongele por completo, puede rociar fertilizantes minerales granulados sobre el suelo aflojado. Pero esto no es suficiente.
Para asegurar dos cosechas, es necesario agregar nitrógeno, fósforo y potasio.
Primero, se añade urea (15-20 gramos por 10 litros de agua) o nitrato de amonio (25-30 gramos por 10 litros de agua). Esto sólo se puede hacer a principios de primavera.
En suelos agotados, las frambuesas se alimentan con una solución especial:
En este sentido, se utilizan activamente estiércol de pollo, gordolobo, ceniza de madera y fertilizantes verdes.
Excrementos de pollo. La solución se prepara en agua tibia en una proporción de 1:20, se infunde durante 24 horas y se usa para alimentar las raíces a razón de 4-5 litros de infusión por metro cuadrado de suelo.
El potasio y el fósforo se pueden reponer agregando ceniza de madera seca o en forma de solución (1 vaso por 1 metro cuadrado, o la misma cantidad de ceniza por cubo de agua tibia).
¡Importante! La fertilización mineral se detiene 3 semanas antes de la primera cosecha.