Agosto es el último mes del verano cuando las noches se vuelven más frescas, amenazando algunas plantas.
En este momento el crecimiento de las plantas se detiene, por lo que conviene utilizar algunas técnicas para alargar el período de fructificación de los pepinos y protegerlos de los cambios climáticos.
A los pepinos les encanta el calor y reaccionan muy mal cuando baja la temperatura del aire.
Esta planta necesita complementos nutricionales. Lo mejor es utilizar fertilizante verde.
Esto ayudará a calentar el suelo y protegerá a los pepinos de los cambios de temperatura.
Prepare una solución para el riego diario del cultivo. Haz una infusión de la hierba y dilúyela con agua en una proporción de 1:5.
Si no tienes verduras, usa azúcar. Para preparar la solución necesitarás 100 gramos de azúcar y 5 litros de agua.
El riego se realiza una vez cada tres días. También puedes cubrir los pepinos con spunbond durante la noche.