En el lenguaje popular, la chinche de la frambuesa es un insecto, pero en círculos reducidos, la chinche de las bayas no es el huésped más raro en los matorrales de bayas.
Dicen que el insecto no causa ningún daño particular, pero solo por el olor ya no quieres compartir la cosecha con él. Te contamos qué debe hacer un jardinero en tal situación.
Puedes utilizar desarrollos populares. Son buenos solo en un caso: cuando hay pocos insectos. El procesamiento sistemático de las plantaciones ayudará a ahuyentar a los nuevos miembros de la familia y, tal vez, ahuyentar a los antiguos. Si la situación es avanzada y los insectos abundan en las frambuesas, tendrás que combatirlos con métodos químicos.
Una opción eficaz es recolectar chinches hediondas manualmente y, al mismo tiempo, monitorear las plantaciones para detectar la puesta de huevos de insectos.
Es necesario mantener el orden en el sitio y evitar el crecimiento excesivo en el campo de frambuesas. Por cierto, esta misma opción te ayudará en caso de prevenir enfermedades fúngicas.
Volviendo a la lucha contra la plaga, para no alterar el frágil equilibrio de la naturaleza, conviene plantar ajenjo o cohosh negro junto a las frambuesas.
El siguiente punto es la excavación obligatoria del suelo a finales de otoño. Además, es necesario eliminar los restos de follaje y otra vegetación para no crear condiciones cómodas para que la plaga pase el invierno.
En el caso de que la población de plagas sea grande, será necesario realizar un tratamiento químico con Iskra, Fufanon o Inta-Vir.