Cultivar berenjenas no es una tarea fácil, comenzando desde la etapa de cuidado y cultivo de las plántulas.
Con estos consejos post-germinación podrás producir una buena cosecha de hortalizas azules.
Es necesario retirar la película a tiempo después de la germinación. Esto debe hacerse cuando la mayoría de las escaleras sean visibles sobre la capa del suelo. No debes esperar a que broten todas las semillas. Si espera, provocará la muerte de otras plántulas.
Baja la temperatura. La planta es termófila. En los primeros 3 a 5 días, 18 a 20 grados, y luego puede bajar la temperatura en 5 grados. En tales condiciones, las plántulas no se estirarán, pero crecerán bien en el futuro.
A una temperatura de +22...+25, las plántulas brotarán en dos semanas; si la temperatura es más alta, las plántulas brotarán antes;
La diferencia entre las temperaturas diurnas y nocturnas no debe ser superior a 5 a 7 grados.
Iluminación adicional. Las horas de luz deben ser de 14 horas. Durante el primer período de crecimiento de las plántulas.
Si las horas de luz son más largas se producirán pocas flores, y de aquí depende la cosecha. Al comienzo del crecimiento de las plántulas, elija el espectro rojo cuando aumentará la masa verde y el azul cuando el tallo crece y para mejorar la absorción de fósforo y otros elementos.
La iluminación adicional juega un papel importante en el cultivo de plántulas. Las lámparas no deben colocarse muy cerca, porque las berenjenas tienen hojas muy delicadas. Si hay mucho sol en los alféizares de las ventanas, es necesario darles sombra.
Bucear. Es mejor cultivar berenjenas en tazas individuales, para luego poder trasplantarlas fácilmente a un nuevo lugar de crecimiento: al lecho del jardín. No es necesario pellizcar el final. Las raíces no deben apoyarse en las paredes de los vasos; deja de crecer y comienza a envejecer.
El tallo comienza a volverse leñoso, la planta pierde las hojas y produce pocos frutos. No es necesario alimentar a las berenjenas antes de bucear; tienen suficientes elementos útiles.
La alimentación de las berenjenas comienza con potasio y fósforo, y solo entonces se requiere nitrógeno. Es gracias a esta alimentación que a la berenjena le crecerán hojas, raíces y flores.