Alimentar las plantas de interior con cáscaras de cebolla puede estimular su crecimiento, floración y rápida expansión del aparato foliar.
Este es un fertilizante muy útil y eficaz que puede sustituir a los productos químicos comerciales.
Prepare este fertilizante usted mismo; no necesita comprar nada.
Elaboración de un producto de recarga.
Coloca las cáscaras de cebolla en agua hirviendo, revuelve hasta que el agua las cubra y deja que hierva nuevamente.
Luego agregue al caldo cáscaras de mandarina y algunas cáscaras de remolacha.
Retira este caldo de verduras del fuego y enfríalo.
Para utilizarlo, prepare una porción fresca cada vez y, para alimentar a las plantas, utilice la decocción tibia. Alimente todas las flores de interior con este producto con la siguiente frecuencia: cuando hace calor, 2 veces cada 30 días, y durante el resto del año, 1 vez.