Los jardineros experimentados nunca tiran las cáscaras de huevo, porque son un excelente fertilizante.
Te contamos qué plantas se benefician de las cáscaras de huevo.
Los tomates, pimientos, coles, ciruelas, zanahorias y berenjenas reaccionan positivamente a la cáscara.
Las cáscaras también se utilizan para alimentar las plántulas y protegerlas de la enfermedad de la pata negra.
No utilice las cáscaras para alimentar pepinos, calabacines, fresas y guisantes.
El fertilizante líquido más eficaz es el elaborado a partir de cáscaras.
Llene un recipiente de vidrio con tapa y vierta agua sobre las cáscaras trituradas (100 gramos de cáscaras por litro de agua) y déjelo durante una semana en un lugar oscuro.
Antes de usar, diluir el fertilizante con agua en una proporción de 1:3.
La cáscara también se puede utilizar para desoxidar el suelo. Añade medio kilo de conchas molidas por cada metro cuadrado de tierra.
Las cáscaras molidas gruesas se utilizan para proteger las plantas de las babosas, los grillos topo y otras plagas.
Además, dichas conchas se pueden utilizar para hacer drenaje para plántulas y flores.