Una buena idea es el comienzo de cualquier negocio. Pero además, es importante decidir si el negocio será rentable y cómo organizarlo todo.
Es necesario para cualquier negocio, incluso el más pequeño. Después de todo, con su ayuda se pueden evaluar las perspectivas laborales, las dificultades, etc. y, lo más importante, un plan de negocios le permitirá comprender si necesita comenzar todo.
Una persona se forma para convertirse en pastelero, adquiere todo lo necesario para trabajar y hace publicidad siempre que sea posible.
Entonces llega el primer dinero. Por regla general, el pastelero piensa que ha hecho un gran trabajo y que no es necesario hacer ningún cálculo. Pero la falta de un plan de negocios no le permite desarrollarse y alcanzar un nuevo nivel.
En la siguiente etapa, es necesario analizar todo el mercado de dichos productos y ver qué ofrecen los competidores.
Esto es necesario para cambiar la receta, la decoración y el formato del negocio en su conjunto. Esto le ayudará a crecer, mejorar y, como resultado, ganar más.
El plan ayudará a:
- calcular los costos necesarios para iniciar y desarrollar el proyecto;
- comprender qué sistema de deducción fiscal es el adecuado;
- decidir qué generará ganancias y su tamaño esperado;
- realizar un análisis de mercado de los competidores;
- comprender cómo progresará el asunto.
En primer lugar, debe tener una idea de cómo funcionará todo y hacer una lista completa de lo que necesita para comenzar. Es muy importante incluirlo todo hasta el más mínimo detalle, de lo contrario luego habrá una desagradable sorpresa en forma de gastos adicionales.
Comprenda si se necesitarán empleados, cuántos y qué salario ofrecerles.
Para hacer esto, necesita comprender qué producto venderá, su precio y cuánto podrá vender en un mes. Para hacer esto, necesita analizar productos similares.
Si quieres prestar un servicio concreto, infórmate de lo que cobran otros profesionales por ello.
Cómo entender usando el ejemplo de un pastel:
- el kilogramo cuesta 20 dólares;
- los de varios niveles se pueden ofrecer a un precio más elevado;
- margen de beneficio del 20 al 40%;
- No debe hacer que el precio sea más alto que el de la competencia.
¡Consejo! Al principio, no conviene inflar demasiado el coste; es mejor decidir sus límites superior e inferior. Esto debe hacerse para no vender el producto por debajo de su costo.
Una vez determinado el precio, es necesario comprender cuántos productos puede producir mensualmente. A continuación, una simple operación aritmética y tendrá el tamaño de la ganancia esperada.
En primer lugar, conviene estudiar los productos que ofrecen.
Ejemplo de pasteles:
- haz de cualquier producto tu especialidad. Por ejemplo, se trata de tartas con forma de coche de carreras para niños y de casas de muñecas para niñas;
- Es importante que los competidores no tengan ofertas similares.
Anteriormente te conté cómo dejar de vivir de sueldo a sueldo .