Pensar antes de hablar es una buena forma de evitar errores y conflictos. Y en el mundo laboral esto siempre es vital, especialmente en puestos de liderazgo.
Hay frases que las personas que lideran equipos o empresas nunca deberían decir.
Al fin y al cabo, estas frases desmotivan, muestran debilidad, no dan buen ejemplo o son agresivas y destruyen cualquier equipo exitoso.
Siempre que fracasamos en nuestro recorrido profesional es porque nosotros mismos hicimos algo mal. No se puede culpar al destino por errores en el trabajo y decisiones equivocadas.
Es muy importante poder identificar con precisión un error y aprender una lección de la situación para no repetirlo la próxima vez.
Reemplace esta frase con algo como "averigüemos qué podemos hacer diferente la próxima vez". Esto demuestra control de liderazgo y motiva al equipo.
Escuchar malas noticias nunca es agradable, pero la construcción de esta frase traslada completamente el problema a aquellos a quienes va dirigida.
Si la situación es compleja, compártela con quienes tienen la autoridad para resolverla, y también ofrece opciones para resolver el problema y explica por qué tomaste una decisión opuesta a la que habrían tomado tus colegas.
Explique su razonamiento de forma clara y directa. La noticia puede ser incluso desagradable, pero si no culpas a los demás y sabes defender tu posición, entonces tendrás que ser respetado.
Si sabe cómo un empleado puede ser más eficaz, simplemente indíquele la dirección correcta.
Si hay una mejor manera de hacer esto, muéstreles cómo. Si no sabe cómo mejorar la productividad de sus empleados, invítelos respetuosamente a pensar en ello y le ayuden a encontrar una mejor manera.
Decir simplemente una frase así sin mostrar generosidad desanima al empleado y le hace sentir incapaz de realizar su trabajo.
Este tipo de frases pueden convertirse en palabras vacías. Quienes realmente estén interesados en recibir información y quieran hacer bien su trabajo tomarán la iniciativa y conseguirán lo que necesitan.
Simplemente sentarse en su escritorio esperando que alguien se acerque a usted definitivamente no resolverá el problema.
Las grandes ideas requieren grandes riesgos. Si no aceptas esto, nunca tendrás éxito. No tengas miedo de fallar. Es mejor tener una mala idea que nunca intentar encontrar nuevas soluciones a los problemas.
No busques caminos fáciles. ¿Tienes una idea interesante? Trabajar en ello, desarrollarlo, proteger sus puntos fuertes y estar abierto a la crítica. Sólo entonces transformaréis verdaderamente el mundo.
A veces, las ideas triviales pueden esconder un gran potencial. Si puedes mejorar algo que ya existe o reinventar algo de una manera nueva, ¿por qué no?
Si no te gusta una situación, trabaja para solucionarla. Todo sigue igual sólo si lo permitimos.
Estas son sólo algunas de las frases que un jefe no debería decir a sus subordinados. Pero claro que hay otros, pero ¿qué opinas al respecto?
Anteriormente, el gobierno publicó listas de actividades permitidas para autónomos y empresarios individuales.