Las casas suecas se consideran, con razón, las más cómodas del mundo.
Hablamos de cinco reglas suecas para conseguir la felicidad en la vida en casa.
En primer lugar, en Suecia intentan tener al menos dos baños en sus casas.
Si solo hay un baño, intentan hacerlo espacioso e instalar en él varios lavabos.
En segundo lugar, los suecos crean un lugar para relajarse en el pasillo. Como regla general, se instala un banco largo.
En tercer lugar, en las casas suecas no sólo hay un comedor, sino también un lugar para tomar un refrigerio.
A menudo, esta función la realiza una isla de cocina alrededor de la cual se ubican los taburetes de la barra.
Los suecos también tienen un lugar para la privacidad en sus hogares. Por lo general, se trata de un alféizar ancho cerca de una de las ventanas.
Y en el sitio siempre hay un cobertizo para guardar cosas. Todo lo que no se utiliza se guarda ahí, para no abarrotar la casa.