A la hora de decorar un salón, mucha gente evita las alfombras.
Y en vano, porque este detalle interior hace que la habitación sea más bonita y acogedora.
Gracias a la alfombra aparece ese mismo ambiente “hogareño”.
Pero este no es el único motivo para colocar una alfombra en el salón.
Yulia Tychino, experta en diseño e interiorismo de la publicación online BelNovosti, mencionó el efecto inesperado de colocar un producto en una habitación.
Resulta que la alfombra ayuda a ampliar visualmente el espacio.
Si el suelo está “desnudo”, la habitación empezará a parecer estrecha. La sensación de comodidad y comodidad desaparecerá.
Pero la presencia de una alfombra hará que visualmente la sala de estar sea más espaciosa.
Pero para lograr el resultado deseado es necesario elegir el producto correctamente.
Por eso, es recomendable utilizar una alfombra lisa y muy grande: debe cubrir casi todo el suelo.
La distancia entre las paredes y los bordes del producto no debe superar los 20 centímetros.
Pero utilizar alfombras pequeñas es un gran error. Debido a estos detalles interiores, surgirá una sensación de caos, diversidad excesiva y “fragmentación” de la habitación.
Anteriormente, el experto contó cómo “arreglar” un baño estrecho.