El lavabo no sólo debe ser cómodo, sino que también debe armonizar bien con el interior general del baño.
La experta de la publicación online BelNovosti, la diseñadora Yulia Tychino , habló sobre a qué hay que prestar atención exactamente al comprar.
Primero debes decidir el material del producto.
Los fregaderos de cerámica están hechos de porcelana o loza. La primera opción se considera más confiable, pero la segunda puede llamarse económica.
El vidrio luce elegante, pero requiere un mantenimiento constante.
El acero inoxidable es bueno por su durabilidad y eficiencia, pero suele ser más adecuado para la cocina.
Los materiales naturales, por ejemplo, el granito o el mármol, encarecerán el interior, pero hay que tener en cuenta que tendrás que gastar mucho dinero en materiales tan fríos y pesados.
La piedra artificial es más ligera y más barata, pero al mismo tiempo es difícil de cuidar, ya que los fregaderos fabricados con dicho material pueden ser vulnerables a los productos químicos agresivos.
También se debe prestar atención a la forma del producto. La mejor opción son los lavabos redondos u ovalados. Si la habitación es pequeña, entonces puedes considerar los lavabos de esquina.
El diseño también puede ser diferente. Se diferencia en los tipos de sujeción.
Por ejemplo, los tazones elevados se ven impresionantes, pero la mayoría de las veces no tienen el tamaño más cómodo, lo que significa que las gotas caerán sobre la encimera.
Un fregadero empotrado se considera una opción más cómoda.
Anteriormente te contamos cómo hacer reparaciones para que no queden obsoletas en un año.