Un elemento interior como una alfombra no sólo tiene una función estética. Este producto también está destinado a servir para aislamiento, aislamiento acústico y térmico, etc.
Por ello, la diseñadora Yulia Tychino, experta de la publicación online BelNovosti, aconseja abordar la elección de la alfombra con especial cuidado y centrarse, en primer lugar, en el material, que, como se sabe, puede ser sintético o natural.
Estos productos tienen muchas ventajas. Me gustaría destacar especialmente su alta resistencia al desgaste, su atractivo brillo y su facilidad de cuidado: usted mismo puede encargarse de limpiar dicha alfombra.
Además, las alfombras de viscosa no se frotan, no se arrugan y no se electrifican.
Estos productos se distinguen por cualidades tales como durabilidad y belleza, ya que a menudo están impresos con diseños brillantes. La poliamida, entre otras cosas, tiene altas propiedades ignífugas y se seca rápidamente.
Se eligen las alfombras de polipropileno porque tienen una estructura de hilo suave y son fáciles de cuidar. Un producto de este tipo le servirá durante unos 5 a 6 años y comprar uno nuevo le resultará económico.
Si necesitas una alfombra que sea suave, duradera y que tenga un alto nivel de aislamiento térmico, el poliéster debería ser tu elección. Y, a pesar de su esponjosidad, no es difícil de cuidar.
Las alfombras de lana, por supuesto, son muy cálidas y agradables al tacto. La vida útil de dicho producto es de aproximadamente 50 años.
Si está interesado en cualidades como la durabilidad, los colores brillantes y el lujo, puede estar seguro de que las encontrará todas en las alfombras de seda.