No es necesario en absoluto invitar a un diseñador o estilista a su casa para cambiar el interior.
Basta con dominar algunos de los secretos de esta habilidad o, como ahora se dice, trucos. Aquí hay 7 técnicas de este tipo que refrescarán el interior sin renovaciones a gran escala.
Seguro que hay algún rincón en la habitación o una estantería en el armario donde guardas algo que no te atreviste a tirar. Todo esto ocupa un espacio que podría aprovecharse.
Por ejemplo, si hablamos de una habitación infantil, en lugar de varias cajas de plástico para juguetes, es mejor colocar una cómoda decorativa. También podrás solucionar el problema del almacenamiento de ropa de cama y otros textiles en el dormitorio.
Existe una gran oportunidad para actualizar muebles antiguos pero cómodos. Basta con volver a pintar las mesas y sillas, añadir una estantería o estantes colgantes, centrándose en colores vivos pero armoniosos.
Es posible que no pueda prescindir de comprar un artículo nuevo. Por ejemplo, si necesita dividir una habitación en zonas, puede comprar un sillón y una lámpara de pie; colocándolos en la esquina, puede crear un rincón apartado para leer.
Las cortinas, almohadas, mantas, colchas, manteles y otros textiles de la habitación deben estar hechos en el mismo esquema de color. Puedes combinar la composición general con la ayuda de una alfombra en el suelo.
No sólo una lámpara de araña nueva, sino también un par de apliques, una lámpara de pie o focos serán suficientes. Con la ayuda de la luz puedes crear verdaderos milagros: aumentar el tamaño de una habitación, ocultar imperfecciones, crear comodidad y comodidad.
Esto es lo principal. Puedes hacer esto no solo esparciendo almohadas por la casa o colgando objetos de arte. En este sentido ayudarán los instrumentos musicales que el propietario sepa tocar, u otras aficiones como dibujar, bordar, etc.