Una mesa de centro cuadrada puede lucir muy elegante, especialmente si su diseño y material combinan con la estética de su habitación.
Sin embargo, no siempre es conveniente utilizarlo, ya que es difícil encontrar un lugar adecuado para muebles de esta forma, informa ADVICE.NEWS .
A continuación se presentan algunas razones por las que es posible que desee comprar una mesa de centro con formas diferentes.
En salas de estar pequeñas o espacios donde el espacio es limitado, una mesa cuadrada puede hacer que la habitación parezca apretada y dificultar el movimiento.
Será difícil moverse por la habitación desde detrás de la mesa y también dará la impresión de desorden o espacio reducido.
La forma simétrica de las mesas de centro cuadradas puede chocar con la distribución existente, especialmente si en la habitación predominan muebles rectangulares o en forma de L.
En tales casos, una mesa de centro rectangular u ovalada puede complementar mejor la disposición de los muebles y crear un equilibrio visual más armonioso.
Las mesas de centro cuadradas suelen tener esquinas afiladas, lo que puede suponer un peligro para la seguridad, especialmente en familias con niños pequeños o mascotas.
Las mesas de centro redondas u ovaladas con bordes más lisos generalmente se consideran opciones más seguras, especialmente en entornos familiares.
Si tiene muchos asientos o entretiene a los invitados con frecuencia, una mesa cuadrada obligará a las personas a estirarse para alcanzar los objetos.