Debido al hecho de que el contenido calórico del apio es de solo 11-13 kcal por 100 g, este producto simplemente debe estar en la dieta de toda persona que esté perdiendo peso.
Existen diferentes formas de comer apio.
Todos los tipos de apio se pueden comer crudos, agregar a ensaladas o usarse como refrigerio, como con yogur bajo en grasa o hummus. De esta forma, el apio conserva todas las sustancias beneficiosas.
El apio pecíolo combina armoniosamente con frutas y verduras y aporta al organismo vitaminas y minerales adicionales.
La raíz y los tallos de apio se pueden guisar con otras verduras o hornear con un poco de especia. El suave sabor de este producto complementará perfectamente muchos platos.
El apio (en todos los tipos) se utiliza en diversas sopas y caldos, añadiendo un rico sabor y aroma.
El jugo de raíces o tallos de apio está ganando cada vez más popularidad y la razón es que tiene muchos beneficios para la salud. Por eso se considera buena la costumbre de beber un vaso de jugo de apio por la mañana.
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