Al subirse a la báscula para determinar su peso, la mayoría de las personas ni siquiera piensan en los matices que pueden influir. Por lo tanto, vale la pena descubrir cómo pesarse correctamente.
El primer paso para pesar correctamente es elegir la báscula adecuada. Hay varios tipos de escalas.
Al elegir básculas, siempre debes prestar atención a su precisión. Por ejemplo, existen escalas para las que el error normal es del 1%. ¿Tiene sentido utilizarlos?
Para obtener resultados precisos, es importante colocar la báscula sobre una superficie plana y dura. Un suelo irregular puede distorsionar las lecturas y hacerlas inexactas.
El mejor momento para pesarse es por la mañana, inmediatamente después de despertarse e ir al baño, pero antes del desayuno. En este momento, el cuerpo se encuentra en el estado más estable, sin la influencia de alimentos ni líquidos, lo que nos permite obtener los datos más precisos.
Para realizar un seguimiento de sus cambios de peso, es importante pesarse a la misma hora todos los días. Los siguientes factores pueden afectar su peso:
Eso sí, si eres racional, puedes pesarte 2-3 veces por semana, esto será suficiente para controlar tu peso.
Para obtener mediciones precisas, se recomienda pesarse con ropa ligera o sin ropa. La ropa y los zapatos pesados pueden añadir algunos gramos o incluso kilogramos adicionales a su peso.
Es importante pararse derecho sobre la balanza, distribuyendo el peso corporal uniformemente en ambas piernas. Además, no lo doble ni lo mueva, ya que esto puede afectar la precisión de las mediciones.
El peso puede fluctuar naturalmente debido a diversos factores, como la ingesta de agua, los niveles de estrés y los cambios hormonales. Es importante observar la tendencia general en lugar de los cambios diarios.
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