Está claro que conviene ponerse a dieta cuando se tiene sobrepeso.
Pero, ¿cómo entender que realmente ha surgido el problema correspondiente?
No debes centrarte sólo en la apariencia: normalmente las personas aumentan de peso lentamente, por lo que no notan inmediatamente los cambios cuando se miran en el espejo.
A menudo sucede que las medidas se toman demasiado tarde: en el caso de la obesidad.
Pero si calcula periódicamente su índice de masa corporal (IMC), el problema se identificará a tiempo.
Necesita saber su propio peso (en kilogramos) y su propia altura (en metros).
El primer indicador debe dividirse por el segundo al cuadrado.
El número resultante debe compararse con la siguiente lista:
Digamos que una persona cuya altura es de 1,8 metros pesa 75 kilogramos.
Calculemos su IMC: 75 debe dividirse por el número al cuadrado 1,8. Resulta 75/3,24 o 23,15. Resulta que el peso de la persona es normal.
Este índice debe calcularse únicamente para personas cuya edad oscila entre 20 y 65 años.
Para los adolescentes y las personas mayores, conocer su IMC no tiene sentido.
Además, los deportistas no deberían realizar este tipo de cálculos. Después de todo, los músculos bien desarrollados hacen que una persona sea más pesada, pero no indican obesidad.
Anteriormente, se supo a qué hora es necesario cenar para mantener un peso normal.