La hoja de laurel es un condimento único conocido por la gente desde la antigüedad.
Las amas de casa experimentadas utilizan esta especia no solo en la cocina, sino también en la vida cotidiana.
Por ejemplo, coloque una hoja de laurel debajo del frigorífico.
Te explicamos qué hace esto y cómo utilizar este truco correctamente.
La hoja de laurel tiene propiedades repelentes; repele literalmente todos los insectos dañinos.
El alcanfor, el pineno y el cineol contenidos en las hojas de laurel inhiben el sistema respiratorio de las plagas.
Las hojas de laurel también se pueden utilizar con éxito como remedio contra las cucarachas.
El olor a hojas de laurel domina el olor a feromonas que estas plagas utilizan para marcar su territorio.
Para expulsar a las cucarachas de la casa, basta con esparcir hojas de laurel en sus hábitats.
Por ejemplo, debajo del frigorífico, detrás de la estufa y el fregadero, en los armarios de la cocina.
No olvides cambiar las hojas periódicamente. Esto debe hacerse cada dos o tres meses.
También se recomienda añadir hojas de laurel al agua para limpiar suelos.