Seguramente muchos lo habéis notado: incluso con un mantenimiento regular, con el tiempo aparece suciedad en los azulejos y juntas del baño.
Además, las baldosas a menudo pierden su brillo original y las juntas entre ellas se vuelven desagradablemente oscuras.
Por supuesto, puedes utilizar productos de limpieza costosos, pero, lamentablemente, a menudo resultan ineficaces.
Pero existe una solución barata que le permitirá solucionar el problema rápidamente.
Sus azulejos y juntas recuperarán su aspecto original, brillarán y agradarán la vista.
Necesitaremos vinagre blanco de mesa con una concentración del 9%, que puede limpiar varios tipos de suciedad.
Lo mezclamos con agua. Las proporciones son iguales.
Si las manchas son graves, puedes utilizar vinagre sin diluir.
Aplicamos nuestro producto con pulverizador o esponja, prestando especial atención a las juntas entre baldosas y zonas próximas a las instalaciones de fontanería.
Dejamos todo así durante 10-15 minutos, si hay moho, unos veinte minutos.
Luego volvemos a repasar las superficies con una esponja. El último paso es enjuagar con agua limpia.
Para potenciar el efecto del vinagre, si hablamos de suciedad extremadamente rebelde y manchas amarillas, puedes añadir bicarbonato de sodio a la solución de vinagre.