El lavado frecuente de ropa blanca no es beneficioso. Los polvos de baja calidad pueden hacer que se vuelva gris y la lejía y el cloro pueden arruinar el material.
Al querer restablecer el orden antes del Año Nuevo, las amas de casa no pueden evitar prestar atención a las cortinas amarillentas.
Así lavan el tul las amas de casa experimentadas.
Llena un recipiente con agua para que cubra completamente el material, agrega una cucharada de refresco y la misma cantidad de sal.
Remueve y remoja el tul durante cuatro horas.
Si la suciedad está arraigada, puedes remojar las cortinas durante 12 horas.
Enjuague con agua fría y lave a máquina en un ciclo delicado.
Disuelva 70 gramos de ácido cítrico en agua tibia y remoje las cortinas durante una hora.
Luego enjuague con agua fría y póngalo en la lavadora.
Disuelve 2 cucharadas de agua oxigenada en una pequeña cantidad de agua y remoja el tul durante 30 minutos.
Enjuague con agua fría y lave en un ciclo delicado.
Las cortinas sólo se pueden lavar en agua a una temperatura no superior a 30 grados y a velocidad mínima.
En lugar de polvo, utilice productos químicos domésticos líquidos.
¡Con estos consejos, puedes volver el tul viejo blanco como la nieve sin la molestia del cloro!