Las amas de casa modernas tienen muchas opciones sobre cómo limpiar el suelo.
En cualquier tienda de productos químicos domésticos podemos encontrar el producto que necesitamos, correspondiente al tipo de revestimiento.
Sin embargo, no todas las amas de casa compran este tipo de composiciones. Sí, son bastante eficaces, pero no se les puede llamar insustituibles.
Siempre existe la oportunidad de ahorrar dinero si utiliza los medios disponibles. Muchas amas de casa experimentadas, por ejemplo, utilizan sal para lavar el suelo.
El primer y obvio punto fuerte de la sal es que costará unos pocos centavos. Este producto es económico y siempre está disponible en casa.
La segunda ventaja es que la sal actúa muy bien contra los gérmenes y bacterias, eliminándolos en cuestión de segundos. El tercer argumento a favor de la sal es sencillo: tiene buenas propiedades limpiadoras.
No es necesario echar mucha sal.
Sólo necesitas añadir unas cucharadas de sal a un balde de agua para lavar el suelo. Si quieres lavar los azulejos, puedes aumentar la cantidad de sal.