Lavar los suelos se ha convertido en una tarea cotidiana para muchas amas de casa.
Basta con pasar un día y no limpiar: aparece polvo y suciedad.
Por supuesto, esta opción no le conviene a nadie. A todo el mundo le gustaría mantener las cosas limpias y ordenadas durante más tiempo.
Resulta que existe una técnica sencilla que mantendrá los suelos limpios durante al menos siete días.
En primer lugar, haga la limpieza clásica: barra el piso o camine con una aspiradora. Si notas manchas rebeldes, siempre puedes eliminarlas con una solución de bicarbonato de sodio o vinagre.
Pero después de eso puedes empezar a limpiar el suelo.
Tomamos unos cinco litros de agua. Protegemos la piel de nuestras manos con guantes. Luego vierte una cucharada grande de amoníaco y mezcla. Después, puedes añadir una pequeña cantidad de glicerina (una cucharadita) y añadir cinco gotas de aceite esencial de agradable aroma.
Empezamos a lavar los suelos.
Gracias a esta técnica la limpieza se mantendrá durante un largo periodo de tiempo.