El té y el café son bebidas populares, pero a veces nos cansamos de esperar a que haya una temperatura agradable para tomarlos.
No a todo el mundo le gusta beber bebidas que queman.
En este caso, vale la pena conocer métodos de enfriamiento sencillos y rápidos.
El secreto es simple: primero vierta café o té en una taza y luego viértalo en otra. Este método es conocido y popular desde hace décadas.
Las bebidas se enfrían muy rápidamente.
Las cucharas de metal normales son ideales para esta tarea. Sólo hace falta bajar la cuchara, esperar un poco y retirar los cubiertos.
Si la temperatura aún es alta, simplemente repita el procedimiento.
Es poco probable que este método sea adecuado para el café, pero los amantes del té definitivamente lo apreciarán. Solo necesitas poner algunas bayas congeladas en una taza.
La bebida no solo se enfriará más rápido, sino que también quedará mucho más sabrosa. Las bayas también tienen propiedades beneficiosas, por lo que la técnica resulta completamente beneficiosa.