Probablemente todo el mundo conozca la existencia de un dispositivo como un palillo de dientes.
Con este palito podrás retirar los restos de comida que se hayan quedado atrapados entre los dientes.
Sin embargo, este está lejos de ser el único propósito de un palillo.
Un palo con extremos puntiagudos puede ayudar a prolongar la vida útil de algunos alimentos.
Hay un truco sencillo. Si aún no te has enterado, ¡arréglalo urgentemente!
Una razón común para la rápida disminución de la calidad de ciertos productos es la presencia de una parte abierta.
Un ejemplo sencillo: para una ensalada sólo necesitabas medio pepino largo. Devolviste la segunda mitad de la verdura al frigorífico.
En tal situación, el corte se desgastará muy rápidamente. El resultado puede ser un fuerte deterioro del sabor del producto o incluso su deterioro.
El problema se puede solucionar de forma muy sencilla: no se apresure a tirar el extremo cortado de la fruta. Asegure esta “tapa” al corte del pepino con un palillo y devuelva la verdura al estante del refrigerador.
Puedes hacer lo mismo con salchicha y limón.
El corte quedará cerrado. Por tanto, el producto se almacenará durante bastante tiempo.
Anteriormente explicamos por qué insertar una pajita en un limón.