No sólo las esponjas de gomaespuma, sino también las de melamina son muy populares entre las amas de casa.
La ventaja de un producto del segundo tipo es la ausencia de necesidad de utilizar agentes de limpieza.
La esponja de melamina elimina la suciedad sin polvos ni geles.
El producto elimina fácilmente marcas de pegatinas y manchas de prendas de vestir.
No en vano a las esponjas de melamina se les llama “esponjas milagrosas”.
Pero el material también tiene un inconveniente. Así, debido a las características de la composición, un producto de este tipo puede suponer un grave peligro para algunas superficies.
Muchas amas de casa no lo saben, por lo que se enfrentan a consecuencias desagradables.
Entonces, ¿qué no debes limpiar con una esponja de melamina?
Frotar esta superficie con una esponja de melamina puede dañar la capa protectora.
Como resultado, la encimera de piedra ya no brillará y se dañará muy rápidamente.
Esta superficie debe limpiarse con un paño de microfibra.
Es posible que queden partículas de melamina en el interior del horno.
Si luego comienzas a hornear algo en el horno, es poco probable que la comida sea segura para el cuerpo.
Los materiales correspondientes pueden resultar gravemente dañados por la esponja de melamina.
Anteriormente te contamos cómo puedes utilizar el acondicionador de ropa en casa.