Siempre quieres que las cosas exudan el aroma de frescura y limpieza después del lavado, pero no siempre es posible lograr ese efecto.
Por ejemplo, si olvidas sacar las cosas de la lavadora y meterlas en la secadora a tiempo, la ropa desprenderá un desagradable olor a humedad.
Esto significa que tendrás que volver a lavar tus camisetas o vestidos favoritos.
El problema también puede ocurrir debido a que el tambor está sobrecargado.
Si el tambor está lleno en más del 80%, las cosas no se lavarán ni enjuagarán bien.
Como resultado, quedarán con una mezcla de olor a sudor y polvo.
Otro error común que lleva a este problema es que no todos recuerdan que el tambor de la lavadora debe limpiarse periódicamente, para que por la acumulación de componentes del detergente y suciedad no aparezca moho, que también “dará” las cosas. un olor desagradable en el tambor.
Anteriormente te contamos cómo lavar correctamente los pañales reutilizables.