Lavarse las manos es una forma sencilla y eficaz de limpiar sus tejidos delicados.
Para empezar, debes ordenar las cosas por tipo de tela, condiciones de lavado y color. Todo esto es necesario para no estropear las prendas de tu guardarropa.
No sería superfluo comprobar la solidez del color del tejido. Sin embargo, algunos productos pierden su color durante el lavado.
Es mejor elegir componentes que se disuelvan completamente en agua para que no queden rastros de polvo después del procedimiento.
Se pueden utilizar suavizantes de telas al enjuagar.
También es importante elegir la temperatura adecuada del agua. Las amas de casa experimentadas no recomiendan utilizar agua caliente para no deformar las cosas.
Primero, el polvo debe disolverse en agua. Luego, debes colocar las cosas en esta solución durante media hora.
Luego es necesario enjuagar las prendas en la solución, pero se deben evitar movimientos giratorios para no deformar la tela.
Es necesario drenar el agua.
Después, deberás llenar el lavabo con agua limpia para enjuagar tu ropa.
Anteriormente te contamos cómo remojar adecuadamente las cosas antes de lavarlas.