Una cápsula para la ropa es un sobre que contiene detergente y acondicionador.
El mercado también ofrece opciones que contienen lejía, quitamanchas, enzimas y polvos.
Estas cápsulas son cómodas de usar, ya que no es necesario medir la cantidad de polvo necesaria.
Tenga en cuenta que estas cápsulas no son aptas para lavarse las manos, ya que el detergente y los ingredientes pueden dañar la piel.
Hay cápsulas tanto para ropa blanca como para ropa de color. El mercado también ofrece opciones versátiles.
Antes de empezar a lavar, es importante leer las instrucciones, que indican la temperatura adecuada. En la mayoría de los casos, el lavado se realiza a 40 grados.
Las cápsulas se utilizan solo durante el ciclo de lavado principal; no tiene sentido activar el ciclo de remojo y prelavado.
Las manchas permanecen si se ha cargado demasiada ropa o si la temperatura se ha ajustado incorrectamente.
Anteriormente escribimos sobre cómo lavar una chaqueta.