Las mantas y almohadas voluminosas causan muchos problemas a las amas de casa, especialmente cuando no se usan, pero solo ocupan un espacio impresionante en el armario.
Parecería que la solución en la superficie es una bolsa de vacío.
Pero si no planeas usar este dispositivo de almacenamiento, puedes usar un truco ingenioso y doblar la manta para que se convierta en una almohada.
Las instrucciones, que le ayudarán a plegar sus accesorios para dormir de forma compacta y bonita, constan de sólo 4 pasos.
1. Doble la manta por el lado corto un cuarto para que el pliegue quede hacia abajo.
2. Determine visualmente la línea del centro del producto y doble la mitad de la manta desde el lado largo hacia el centro. Esta vez la puerta de entrada debería estar hacia arriba.
3. Coloque la mitad restante de la manta sobre la mitad doblada y enrolle la manta desde el extremo desplegado. Tres vueltas serán suficientes.
4. Gire el bolsillo resultante desde un borde y meta el otro lado de la manta dentro de él. Ahora puede evaluar los resultados de su trabajo: la manta queda doblada de forma compacta y ordenada.
Anteriormente, compartimos un método para lavar una manta sintética que no deja grumos.