No es ningún secreto que cuando se utiliza una lavadora aumenta el consumo de energía.
Sin embargo, puedes ahorrar dinero si evitas los errores más comunes en este proceso.
A continuación, te contamos cómo puedes reducir el consumo de energía eléctrica durante el lavado.
La mayor cantidad de electricidad es absorbida por unidades de las clases A++, A+, A, B y algunas otras.
Al comprar una lavadora, se recomienda elegir la clase A+++.
Al mismo tiempo, muchas lavadoras modernas tienen el modo "Economic Wash" o "Eco Wash", que permite consumir una cantidad mínima de electricidad y agua.
A la hora de lavar, conviene cargar el depósito de la lavadora lo máximo posible.
No olvide que la unidad utiliza la misma cantidad de energía cuando trabaja con varias cosas que cuando trabaja con el tanque completamente cargado.
Recuerda: cuanto más detergente en polvo o líquido, más espuma.
Esto significa que en este caso la máquina drenará el agua con más frecuencia y se llenará con agua nueva.
Para ahorrar energía, no es necesario utilizar opciones adicionales como “remojo previo”, “secado”, “inicio diferido”.
Puede remojar la ropa en un recipiente y secarla en el balcón.
Si es posible, configure modos en los que la máquina calentará el agua a no más de 30 a 40 grados.
A una temperatura de 60 grados, la lavadora consume 4 veces más electricidad que a 30 grados.
Anteriormente hablamos de 3 formas que alargarán la vida útil de tu lavadora.