Los vasos de cristal con maravillosos diseños fueron reemplazados por vasos igualmente elegantes hechos de vidrio fino.
El problema es que estos platos pueden marchitarse. Beber de un vaso turbio es desagradable, al igual que comer con cubiertos que han perdido su brillo.
En este caso, hay un sencillo truco que limpiará la cristalería y los cubiertos deslustrados.
Normalmente, esta molestia les ocurre a los propietarios de lavavajillas que escatiman en el uso de sal o añaden más detergente de lo normal.
Cuando se lavan a mano, los utensilios y platos se vuelven opacos debido al agua dura.
La forma más sencilla, además de tener que arruinarte y comprar sal para el lavavajillas, es hacer algo como esto.
En el recipiente de los cubiertos, debe colocar un trozo de papel de aluminio normal enrollado formando una bola.
A continuación, llenamos la máquina sin sobrecargar, añadimos la cantidad exacta de detergente y ponemos en marcha el equipo.
El truco de vida funciona. Mediante una reacción química se pueden eliminar las manchas rebeldes y devolver el brillo a vasos, copas y cubiertos.
Anteriormente te contamos cómo evitar que los cristales se empañen .