Existen dos métodos de lavado que pueden eliminar incluso las manchas más difíciles.
Se llaman “tres cucharas” y “ocho cucharas”.
En un recipiente con agua tibia, disuelva una cucharada de levadura en polvo y dos cucharadas de sal, y remoje los artículos.
Pasadas unas horas lo sacamos y lo lavamos en la lavadora.
Para mayor efecto, puedes verter un par de cucharadas de sal en el tambor de la máquina. Después del lavado brillará y tu ropa quedará perfectamente limpia.
Disuelva 8 cucharadas de sal en un litro de agua, agregue una cucharada de limón y un bálsamo para el cabello.
A continuación, simplemente vierta la cantidad requerida del producto resultante en el compartimento del acondicionador. Vierta el polvo como de costumbre. El resultado te sorprenderá gratamente.
Anteriormente te contamos cómo secar rápidamente los zapatos mojados.