A veces nos encontramos ante la necesidad de limpiar la lavadora.
Los problemas más comunes son el moho y los malos olores.
Si existen desventajas de este tipo, no conviene utilizar la máquina: primero hay que lavarla.
Deberá verter más blanco normal en el compartimento del polvo. No enviamos nada al tambor. Ponemos la temperatura a 90 grados.
Normalmente esto corresponde al ciclo de lavado del algodón.
La máquina funciona durante 60 minutos.
Luego apágalo, pero no te deshagas del líquido. Déjelo dentro del equipo por al menos 12 horas. Luego seleccionamos un centrifugado con agua escurrido y evaluamos el resultado.
Como regla general, no queda moho ni olores desagradables. Si aún hay problemas, aplique blanco a la esponja y repase las áreas problemáticas. Será necesario proteger las manos y los órganos respiratorios.
Luego simplemente ponemos en marcha la máquina sin ningún medio para deshacernos de los restos de productos químicos domésticos.