Mucha gente está acostumbrada a guardar huevos en las puertas del frigorífico. Pero esto es un error.
Aún así, es mejor dejar dicho producto en los estantes principales.
Las puertas son el lugar más cálido de este dispositivo, donde se producen constantes fluctuaciones de temperatura.
Puedes dejar salsas y vinagres en ellos.
También puedes colocar pequeñas botellas de agua si necesitas enfriar el líquido. Los contenedores pesados no son adecuados para el almacenamiento en ese lugar.
Pero puedes dejar conservas pequeñas, por ejemplo, pasta de tomate, paté o tarros de guisantes o maíz.
También puede dejar botellas de aceite vegetal abiertas de forma segura en este lugar. En cuanto al aceite de oliva, no se debe dejar en el frigorífico.
Es aceptable dejar pequeños trozos de mantequilla y queso, que se pueden servir calientes.
Las principales reservas de estos productos deben dejarse dentro del frigorífico.