El papel pintado, ya sea papel, vinilo o cualquier otro, es quizás la opción más utilizada para la decoración de paredes.
Pero, ¿qué hacer si decides actualizar el interior y los cuadros antiguos no se pueden separar de la pared?
En tal situación, primero debe hacer cortes en el papel tapiz a lo largo de todo el perímetro.
En esto te ayudará un rodillo con clavos o una espátula muy común y corriente, con la que podrás hacer pequeñas muescas en el lienzo.
Después de eso, debes abastecerte de agua tibia y mojar las paredes con ella.
Para hacer esto, empape una esponja en agua y limpie la pared con ella; de esta manera podrá saturar el papel tapiz con líquido.
Después de esto, deberás esperar un par de minutos, y cuando veas que la capa se ha oscurecido por completo, podrás comenzar a retirarlos.
En el caso del papel pintado vinílico, en esta etapa sólo se puede quitar una, la capa superior, tras lo cual habrá que repetir el procedimiento nuevamente.