Es mejor mantener algunas cosas fuera de casa o desecharlas de manera oportuna por varias razones.
En primer lugar, las cosas viejas ensucian tu casa y la dejan desordenada.
Pero hay otra razón: se cree que ciertos objetos pueden provocar vibraciones negativas, que harán la vida más miserable.
No tiene sentido guardar este tipo de prendas de vestuario. Si crees que puedes poner en orden tus zapatos y tu ropa, no lo pospongas.
Si vas a dejar algunas de tus cosas para la casa de campo, llévalas allí.
Los platos viejos que ya no puedas lavar no deben estar en la cocina. La misma regla se aplica a elementos con astillas y grietas.
Las flores secas no se pueden guardar en casa, algo que no todos los conocedores de la estética saben. Además, no debes dejar flores hechas con materiales artificiales en casa.
Si te deshaces de estas cosas, podrás hacer tu vida más feliz.