Debido al hecho de que el alféizar de una ventana de PVC tiene una superficie rugosa, aparecen fácilmente manchas de diversos orígenes.
Para eliminarlos, las amas de casa limpias pasan al menos media hora frotando con todas sus fuerzas la superficie que alguna vez fue blanca.
Afortunadamente, existe una manera más sencilla de devolver el alféizar de su ventana a su apariencia original.
Para ello, tendrás que empezar a preparar un producto de limpieza: natural, eficaz y completamente inofensivo.
Primero, lava el alféizar de la ventana con agua y jabón y luego podrás comenzar a preparar la mezcla de lejía.
Para ello, mezcle 1 cucharada de polvo dental y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio.
También vale la pena verter aquí una pequeña cantidad de peróxido de hidrógeno para obtener una mezcla pastosa.
Aplíquelo con una esponja en las áreas manchadas y frote con movimientos circulares, luego enjuague y seque el alféizar de la ventana.