Cuando se usan con regularidad, las ollas pueden cubrirse de hollín y manchas de grasa que son difíciles de eliminar.
Pero utilizando métodos probados, esto no será difícil.
Este método funciona muy bien contra las manchas formadas localmente que no se pueden eliminar con un lavado regular. Necesitas tomar sal y diluirla con agua.
No es necesario disolverlo: la consistencia del producto debe ser bastante espesa.
Lo aplicamos sobre las propias manchas, esperamos 20 minutos y comenzamos a frotar las manchas con una esponja.
Se sabe que este producto es uno de los más eficaces, seguros y de alta calidad. Moler un cuarto de pieza, agregar suficiente agua y colocar el plato al fuego.
Cuando notes que el jabón se ha disuelto, tendrás que cronometrar el proceso durante 15 minutos.
Después, tendrás que retirar la solución y volver a pasar una esponja si queda algún resto de suciedad.
Vale la pena señalar de inmediato que este método no es adecuado para contenedores de aluminio. Combine agua y vinagre en proporciones iguales y colóquelos al fuego.
Después de que el líquido hierva, apágalo y agrega tres cucharadas de refresco. Esperamos 20 minutos, escurrimos el producto y evaluamos el resultado.