Muchas amas de casa saben que las hojas de laurel actúan como un repelente fiable de varios insectos, por eso las utilizan para proteger los cereales de la aparición de parásitos.
Otras amas de casa incluso fumigan el apartamento con hojas de laurel, creyendo que esto mejorará el olor de la casa y le dará vibraciones positivas.
Pero hay un par de usos más que vale la pena probar.
Pocas personas saben que con la ayuda de una hoja de laurel puedes limpiar tu alfombra. Para ello será necesario añadir a un litro de agua cinco hojas de laurel, un poco de canela molida y unos clavos.
La "poción" se elabora durante diez minutos a fuego lento. Luego es necesario llevarlo a temperatura ambiente, filtrarlo y enviarlo a un recipiente con una botella rociadora.
Aspiramos la alfombra y aplicamos el producto. Cuando se seque, puedes cepillarlo y aspirarlo nuevamente.
Las hojas de laurel hacen un excelente trabajo al eliminar los olores desagradables. Lo mejor es picar ligeramente la especia y colocarla en una bolsa de tela natural.
Puedes olvidarte del olor desagradable durante varias semanas.