Las alfombras a veces pueden provocar un olor desagradable que estropea el resto de la habitación.
Sin embargo, podrá deshacerse del problema sin mucha dificultad.
Quizás este método sea uno de los más habituales. Si ha comprado una alfombra nueva que huele desagradable, debe tratarla minuciosamente.
Para hacer esto, el recubrimiento se cubre completamente con una capa de refresco y se deja durante un día. Ya solo queda pasar con una aspiradora y retirar el polvo.
Si el problema es de naturaleza local (por ejemplo, una mascota "hizo un charco" en un área determinada de la alfombra), primero se elimina la causa del olor desagradable, luego el refresco se diluye con agua y se aplica como una capa al revestimiento.
Cuando el producto se seque, es necesario cepillarlo. Retiramos los residuos con una aspiradora.
Este producto ayudará a eliminar el contaminante si es necesario, así como a restaurar el olor normal del producto. Tome parte del agua, tome parte del peróxido, vierta un poco de gel.
El producto debe mezclarse y aplicarse sobre el revestimiento durante 15 minutos. Después limpiamos la alfombra para eliminar cualquier resto de composición.
Para hacer frente al olor desagradable, es necesario diluir un poco de permanganato de potasio en agua. La solución debería volverse rosa.
Posteriormente tratamos la alfombra con el producto. Al cabo de un cuarto de hora, aspiramos la alfombra.