Como usted sabe, la evaporación del yodo que entra en contacto con la piel se produce en unas pocas horas.
El tiempo exacto depende de muchos factores, incluida la temperatura del aire y la temperatura de la piel, así como de otros parámetros.
Es por ello, dicho sea de paso, que el mito sobre la rejilla de yodo como forma de detectar la deficiencia de yodo en el organismo no es más que una ficción (recuerde, se cree que si la rejilla de yodo aplicada sobre la piel se elimina rápidamente absorbido, entonces la persona tiene escasez de este elemento).
Sin embargo, hay situaciones en las que no te queda ni siquiera ese poco de tiempo, por lo que hay que recurrir a medidas de emergencia para eliminar dichas manchas.
Para ello, puede utilizar el jabón de lavar más común, peróxido de hidrógeno o una solución de soda.
Una solución que contenga alcohol también es eficaz. Como último recurso, puedes utilizar jugo exprimido de limón.
Aplique cualquiera de los productos enumerados sobre la piel con un algodón.
Deje actuar el “limpiador” durante un par de minutos o simplemente frote el área sucia de la piel y luego lávela con agua limpia y jabón.
El toque final es aplicar crema hidratante.