Algunas personas creen que el problema de un baño viejo, aterrador y oxidado sólo puede solucionarse radicalmente, es decir, reemplazándolo.
Afortunadamente, existe una solución mucho más sencilla en todos los aspectos.
Resulta que es posible transformar los accesorios de plomería en un estado similar usando solo dos ingredientes: amoníaco y peróxido de hidrógeno.
Por tanto, dicha composición tiene 2 ventajas principales: en primer lugar, la disponibilidad de sus ingredientes y, en segundo lugar, su eficacia.
Entonces, ¿qué deberías hacer? Hay que buscar un tarro de 0,5 litros (debe estar limpio y seco) y verter en él 100 ml de amoniaco.
Vierta 50 ml de peróxido de hidrógeno en un chorro fino. No olvide protegerse las manos con guantes antes de realizar todas las manipulaciones.
Solo queda mezclar bien el contenido del recipiente. La forma más sencilla de hacerlo es agitando el frasco.
Ahora empape un paño seco en la solución resultante y limpie con él el fondo y los lados de la bañera. Espere de 10 a 15 minutos y enjuague con agua limpia.