Lavar toallas de felpa no siempre produce el resultado deseado.
A menudo los productos permanecen rígidos. Además, puede persistir un olor desagradable.
Si esto sucede, primero debe comprender las razones.
A menudo, los problemas surgen debido a que una lavadora no funciona correctamente: a veces el propio dispositivo mancha las cosas.
Es posible que el problema se deba a un modo de lavado incorrecto o a un detergente de baja calidad.
O quizás el ama de casa simplemente dejó las toallas mojadas en la cesta durante mucho tiempo. Entonces se crea un entorno propicio para la proliferación de microorganismos y, por tanto, para la aparición de exceso de olor.
Si se descubre la causa, entonces se debe eliminar el problema. Pero, ¿cómo salvar un producto con olor desagradable?
La respuesta es sencilla: es necesario volver a lavar la toalla. Pero esta vez usando un producto adicional.
El bicarbonato de sodio ayuda a eliminar los olores desagradables.
Este producto no solo tiene propiedades absorbentes, sino también desinfectantes.
Por lo tanto, los refrescos no solo absorberán el hedor, sino que también eliminarán su fuente (si son bacterias) y también restaurarán la suavidad de los productos.
El nuevo lavado de toallas se debe realizar de la siguiente manera: vierta bicarbonato de sodio en el compartimiento de polvo (35-40 gramos por kilogramo de prendas) y ejecute el modo de lavado completo. La temperatura debe ser de 60 °C.