A primera vista, preparar té no tiene nada de complicado. Especialmente cuando se trata de un producto envasado.
Todo parecía sencillo. Simplemente coloque la bolsa en una taza, vierta agua hirviendo sobre la bolsa y espere unos minutos.
De hecho, esta es la forma incorrecta de preparar una bebida popular.
Necesitas preparar té de otra manera.
Llenar una bolsa con agua que acaba de hervir es un error grave y, lamentablemente, común.
Un líquido demasiado caliente impide que las hojas de té revelen todas sus cualidades.
En primer lugar, se trata de gusto. El té vertido con agua hirviendo rara vez adquiere un aroma brillante.
El resultado es un líquido casi insípido y difícil de disfrutar.
Para que la bebida siga resultando sabrosa, es necesario utilizar agua ligeramente fría al prepararla.
Es importante que la temperatura del líquido utilizado no supere los 80 grados.
Por lo tanto, no se apresure a verter agua en una taza de una tetera que acaba de silbar. Espere al menos 2-3 minutos y solo entonces llene la bolsita de té.