Cualquier ama de casa experimentada siempre debe tener buenas ideas sobre cómo poner en orden los textiles de la cocina.
Si dominas esta habilidad, podrás ahorrar mucho en la compra de toallas.
Existe un método interesante que muchos consideran el más eficaz. Con su ayuda podrás olvidarte de olores desagradables, manchas y grasas.
Necesitaremos preparar una cacerola muy grande y llenarla de agua. Debe haber al menos cinco litros de líquido. Luego echamos en la sartén tres cucharadas de lejía más barata y unos cien gramos de polvo. También puede ser económico.
Pero eso no es todo. Queda por agregar una cucharada de cualquier aceite vegetal.
Empezamos a hervir la mezcla.
Una vez que aparecen burbujas, se puede apagar el fuego. Enviamos los textiles a la composición preparada.
Espere un par de horas. Saca una toalla y evalúa el resultado. Si aún quedan algunas manchas, puedes meter el tejido en la lavadora.