A pesar de que los gourmets y conocedores "regañan" el té en bolsas, considerándolo insuficientemente aromático y sabroso, la bebida no está perdiendo popularidad.
La bolsa se puede preparar fácil y cómodamente, incluso si una persona está muy cansada.
Sin embargo, no todo el mundo sabe que también es necesario poder preparar una bebida envasada. Por cierto, casi todo el mundo comete un error durante este sencillo proceso.
Todo el mundo sabe perfectamente cómo son las clásicas bolsitas de té. Las materias primas envasadas se aseguran con una cuerda especial, en cuyo extremo hay una etiqueta.
Normalmente guardamos la etiqueta y la enviamos a la taza de esa manera. Sin embargo, a menudo la bolsa “se desprende” de nuestras manos y luego tenemos que sacarla de alguna manera del contenedor.
De hecho, necesitas hacer las cosas un poco diferentes.
Primero debes colocar la etiqueta directamente sobre la mesa, coloca con cuidado la taza para que termine sobre ella. Solo después de esto debes colocar la bolsa en el contenedor.
Con este sencillo truco la bolsita de té quedará fijada de forma segura.